capitulo 22

Con la voz rota y lágrimas en los ojos, junto a esa tumba sobre la cual hay un ramo de rosas blancas, Christian lee a su amado la Biblia. En concreto versículos de "El cantar de los Cantares."
"Mi amado es deslumbrante y colorado... su cabeza es oro, oro refinado... sus cabellos negros son como el cuervo. Sus ojos son como palomas junto a los canales de agua bañándose en leche... Sus mejillas son como un cuadro de jardín de especias...sus manos son cilindros de oro... su abdomen es una lámina de marfil cubierta de zafiros. Sus piernas son columnas de mármol fundadas en pedestal con encajaduras de oro refinado..."
Cuando el dolor no lo deja seguir cierra el libro. Mira esa tumba con ojos llorosos. Acaricia el cemento. Se guarda la Biblia mientras dice:
--aquí habrá del amor, el amor puro... un amor como el nuestro... Esto seguro que tu Díos aprueba todo tipo de amor, sea como sea...
Muy triste se santigua.
--vuelvo lo semana que viene...
Le cuesta irse, siente que deja parte de su vida, de su alma, de su cuerpo...llora como un niño.

Por otro lado, Eduardo recibe una noticia de Consuelo que lo impacta.
--¿tu padre deja que nos casemos y ahora?
--él no estará pero no se opone...
--¿cómo lo has convencido?
--digamos que hemos llegado a un acuerdo...
--¿de qué hablas?
--Mi padre sabe porqué hago las cosas...
--¿cual es el misterio?
--Ningún misterio. Sólo que tú y yo nos casamos. ¿no es lo que querías?
Eduardo la abraza.
--claro que sí... por fin... después de tanto tiempo...

La ceremonia es al cabo de unas semanas en el salón de su congregación. Es discreta y sin la presencia de la familia de ambos pero los novios se muestran muy felices. Mientras Chris llora ante la tumba de su amado:
--aquí están tus rosas blancas de todas las semanas, cada sábado te las traeré hasta el fin de mis días...
Luego se sienta al lado de esa tumba y lee un poco de la Biblia. Lágrimas y recuerdos. Junto a la tumba de Emilio siente un poco de consuelo a su atormentada alma. Luego se acerca al fatídico puente. Le atormenta recordar ese día. Es algo que no puede borrar de su mente. Es la misma hora en la que sucedió todo. No hay mucho tráfico así que deja su auto en un lado de la carretera. Desde ahí contempla el punto exacto en el que yació el cuerpo de Emilio. Llora lágrimas de sangre, como esa sangre en la que estaba envuelta el cuerpo del que tanto amó la última vez que lo vio. Decide hace el recorrido inverso. Sube por la pendiente, tiene muy presente cada uno de esos angustiosos minutos. Mira hacia abajo des del puente... Se le hiela la sangre al recordar como el cuerpo de Emilio caía al vacío. Sigue con ese camino de la destrucción recordando el dolor de su amado al saber lo de la apuesta. Casi sin darse cuenta se acerca a la congregación. Siente un gran rencor hacia ese sitio. Se iba a ir pero se emociona en ver que hay una boda... Recuerda la boda de sus padres, la cercanía con Emilio. Al darse cuenta que los novios son Consuelo y Eduardo se quiere ir pero ellos lo ven. Eduardo lo mira con un miedo. Siempre que ve a Christian cerca vive con el miedo de que se descubra su desliz con él. Christian da la vuelta para volver a atrás. Consuelo va tras él.
--déjalo... --le pide Eduardo.
Eduardo no quiere que su esposa se enfrente a Christian, quiere que esté alejado de él. Consuelo corre y atrapa a Christian que se iba abatido. Lo agarra del brazos.
--¡¡¿¿¿qué haces aquí hijo de puta?¡
Eduardo agarra a Consuelo:
--¡¡cálmate¡¡
Christian se gira, la mira lloroso. La joven es toda odio:
--¿¿¡que haces aquí?¡ ¡¿¿es que quieres manchar mi día más feliz... Nadie te quiere en este lugar...¡
Aunque le duele el dolor de Consuelo, Christian la comprende. Habla con pena:
--no, no sabia que te casabas, pasaba por casualidad. Esto es la calle, no pensaba acercarme más...
La joven está como loca:
--¡¡no te creo nada...¡¡ ¡¡quieres acabar con mi vida al igual que acabaste con la de mi hermano...¡¡
Christian se rompe de dolor:
--quiero que sepas que lo siento mucho.. me horroriza saber que le causé tanto daño...
Christian no puede controlar sus lágrimas, Se va muy triste. A Consuelo le conmueve su dolor. Siente culpa... desea atraparlo para contarle algo pero mira a Eduardo.
--un trato es un trato... --dice la joven para sí mientras recuerda las palabras de su padre como con voz firme le decía:
--si me quieres hacer chantaje con lo que sabes, está bien... Yo no me meto en tu vida y tú no te metes en la mía... Tu no hablas de eso y tú te casas con quien quieras...
Así que prefiere olvidar a Christian.
--no es mal tipo... --le dice Eduardo.
A Consuelo le duele que su esposo lo defienda:
--¡¡déjame en paz...¡¡
--¿¿qué te pasa...¿¿ ¡¡estás muy rara...¡¡
--¡¡nada¡ --dice ella.
La joven se quiere ir enojada pero su esposa la agarra del brazo:
--es como si ocultaras un gran secreto? ¿es que hay algo que sepas y que no me hayas contado?
Consuelo no dice nada, solo abraza con fuerza a su marido.

Christian por su lado se refugia en su auto. Se da golpes en la cabeza con el volante. LLora. Luego abandona ese lugar...

Julia llega a la casa. Es muy tarde. Christian está despierto. Está en pijama, muy triste despatarrado en el sofá. Con el portátil encima. Escribe como se siente y luego lee todo lo ha escrito durante el tiempo en el que sedujo a Emilio. Al ver llegar a su compañera de piso le dice:
--son las 3 de la madrugada, ¿de donde vienes tan tarde...?
--he estado con un productor... quiere llevar un guión mío al cine pero no le gusta ninguna de las historias que presento y se las he hecho revisar varias veces. No sirvo para esto al parecer...
--No digas eso... estoy seguro que encontrarás la historia perfecta y saldrá una historia muy bonita.
--y tú?
--no puedo dormir... --triste
--así que te sientas aquí en la oscuridad. ¿Porque no nos olvidamos de la dieta sana y nos vamos a comer unas hamburguesas...?
--volveré a la cama --dice él muy apagado.
Se levanta se ha dado cuenta que se ha dejado el ordenador encendido. No tiene ganas de volver atrás.
--ya lo cierro yo... tranquilo...
Christian se tumba en su cama, besa la medalla que lleva en el cuello. Mira la foto que tenía Emilio guardada en su Biblia y que él tiene siempre con él.
Al ir a apagar del ordenador, Julia no puede evitar leer algunas de las frases que ha escrito su amigo. "una vez más no puedo dormir, es como si estuviera esperando que el tiempo arregle esa parte de mi que sigue rompiéndose". A Julia se le ocurre algo. Mira hacia atrás para asegurarse que Christian no la ve. Entonces busca un cd en blanco y guarda la información de su amigo.



Meses después... En el primer aniversario de su muerte, Christian está en la tumba de su amado. Con rosas blancas. Pasa mucho rato en esa tumba. Tiene una lápida sencilla que él mismo ha hecho poner ya que parece que su familia se ha olvidado de él. "para siempre Emilio" y debajo hizo grabar: "permanecen la fe, la esperanza... el mayor de estos es el amor. 1 cor 13:13."



Más tarde, Christian y Julia se encuentran en un cine.
--ya era hora...
--tenía algo importante que hacer... es que has ido a elegir un día para que yo vea tu película...
--ya lo entenderás... hoy es el preestreno, a partir de mañana todo el mundo la podrá ver, yo quería que tú fueras el primero en verlo...
--yo tengo que ver eso, es que lo has llevado como si fuera un secreto de estado.
--espero que no te pongas a juzgarme...
--¿tan basura es?
--No.
Los dos entran. No hay mucha gente. Comienza la película. "rosa blanca, calido amor prohibido". La primera escena es cuando se conocen los dos protagonistas, él trabaja en un bar, el otro viene en un coche. Christian va mirando sorprendido a Julia al reconocer su propia historia, la historia del guaperas y el Testigo de Jehová.

Mientras, Emiliano llega con alguien a un apartamento.
--bien, hijo... esta es nuestra casa...
Emilio tiene la mirada vacía. Está aturdido.