capitulo 26

Eduardo sale de la ducha. Tocan al timbre. Sale desnudo y secándose la cabeza.
--otra vez te dejaste las llaves mi amor... --dice sonriendo.
Seguro que es su esposa, Eduardo abre la puerta desnudo. Se asusta y se avergüenza al ver a Christian pero a éste no le de mueve ni un pelo ante la desnudez de ese hombre tan guapo. No se fija. Eduardo se pone la toalla en la cintura. Christian entra como un loco:
--¡¡¿¿qué pasó con Emilio?¡¡ ¡¿¿¿qué le hicieron??¡
Eduardo lo mira como si estuviera loco:
--¿¿¿Emilio??? ¿¿¡te volviste loco? ¡¡Murió hace mucho¡ ¡¡ya lo sabes¡
Christian está desesperado. Se lleva las manos a la cabeza.
--¡¡¡no me tomes por tonto... Emilio está vivo¡¡ ¡¡lo acabo de ver...¡
--¡¡eso es imposible... lo enterramos¡
--¡¡por eso no me dejaron ver su cuerpo...¡¡
--¡¡eso que dices no puede ser verdad...¡¡
--¡he hablado con él... ha perdido la memoria...¡¡ ¡¡era él... estaba con su padre...¡¡ --Christian desesperado.
Se hace un silencio. Amenazante Christian le dice:
--si no me cuentas la verdad le diré a tu esposa que nos acostamos juntos...
Eduardo lo mira con miedo:
--¡¡no me hagas esto... Consuelo está embarazada¡¡
Christian está muy alterado:
--¡¡te lo repito una vez más... ¿¿cómo es que Emilio está vivo y a mí me dijeron que estaba muerto...¡¡
--¡¡yo te juro que no sé nada...¡
Christian se sienta en el sofá. Eduardo está histérico:
--¡¡Consuelo va a venir... no le gustará verte a aquí...¡
--la espero, quiero que sepa que fuimos amantes...
--¡¡no me hagas esto¡ --Eduardo desesperado.
--¡¡no me lo hagas tu a mi¡ ¡¡quiero que me hables de Emilio...¡
--Yo no sé nada, sólo sé que Emiliano no quería que nadie se acerca al ataúd... Sé que Consuelo se quejó de que ni ella vio el cadáver... luego Consuelo sabía un secreto de su padre por lo que lo dominaba...
Christian se levanta:
--¡¡claro que Emilio está vivo¡
--yo te prometo que te averiguo todo... pero vete...
--está bien, pero si me traicionas... yo lo cuento todo...
--¡¡No... no...¡¡ por favor. No me lastimes en vano... No ahora --Eduardo muy nervioso.
Christian lo mira muy herido.
--¡¡más me lastimaron a mí... así que no voy a tener compasión de los que no la tuvieron conmigo...¡
Christian se va, se refugia en el bar en el que conoció a su amado. Ignacio lo abraza.
--¡¡dichoso los ojos...¡
Christian está muy ansioso:
--¡¡Emilio está vivo... está vivo...¡
Ignacio lo mira como si estuviera loco.

Eduardo por su lado al llegar su esposa dice:
--¡¡es cierto que tu hermano vive??¡
Consuelo, muy embarazada, se queda de piedra.
--¿¿de qué hablas??
Eduardo la zarandea, sabe que de esa confesión depende su felicidad. Haría lo que fuera por el silencio de Christian.
--¡¡tu hermano está vivo si o no¡¡
--¡¡primero quiero saber de dónde has sacado esto¡
Eduardo está muy nervioso y por eso es muy agresivo y es que sabe que si no le arranca esa confesión a su esposa, Christian es capaz de arruinar su matrimonio.
--¡¡no me mientas... yo sé que Emilio está vivo, sólo que ha perdido la memoria...¡
Consuelo se sienta en el sofá llora.
--¿¿¡porqué me haces esto? ¡¡nuestro hijo... le queda tan poco para nacer...¡ ¿¿¿es que quieres que lo pierda??¡
Eduardo se siente culpable. Se sienta al lado de su esposa. Es más cariñoso con ella.
--perdóname, pero entiéndeme... Me han dicho que Emilio está vivo y yo he quedado con el idiota que no lo sabía... No voy a creer que tu padre te ocultó a ti también que estaba vivo. ¡¡Ese es el secreto del que siempre me has hablado que le sabías a tu padre¡¡
--solo dime una cosa... ¿quien te dijo?
Eduardo tiene que pensar rápido, sabe que si le dice que fue Christian ella no le va a contar nada y entonces está perdido. Eduardo sin pensar le dice a su esposa:
--fue un hermano de la congregación... lo vio por casualidad... Creyó que era alguien parecido pero ¿no lo es verdad?
--No.
Eduardo la mira aliviado al ver que su esposa empieza a hablar:
--ahora cuéntamelo todo...


Christian está muy aturdido en el bar dónde trabajó por tanto tiempo. Todo sigue igual. Excepto que ni él ni Julia trabajan allá. Ignacio le sirve una copa mientras que Gabriel y Nicolás ensayan su show.
--venga, cálmate... tómatelo todo de golpe...
Christian se toma el trago de golpe y otro. Ignacio le sonríe.
--¿a que hora te encuentras mejor?
--No estoy loco si es lo que crees...
Ignacio lo acaricia fraternalmente:
--¿¿porqué no me crees?
--¿¿y cómo quieres que te crea?? La ausencia de sexo te esta haciendo tener alucinaciones... es que no es nada sano llevar más de un año sin hacerlo.
--¡¡no estoy loco¡¡
Ignacio lo mira con pena algo que molesta mucho a Chris. Los interrumpe el celular de Chris. Éste toma la llamada ansioso porque la estaba esperando. Siente que el corazón le va a estallar al escuchar de boca de Eduardo:
--ya te averigüé todo... ¿cuando nos vemos?
--Ahora... --Christian ansioso.
Eduardo habla en el baño:
--No sé si pueda salir.
--o vienes tú o te vengo a buscar...
Quedan en un restaurante que hay en un lugar intermedio. Christian se va muy alterado dejando a su amigo preocupado. Eduardo le dice a su esposa que le ha surgido un compromiso y la deja con la palabra en la boca. Eduardo y Christian se encuentran en la puerta del restaurante.
--gracias por venir --dice Christian muy ansioso.
Eduardo se siente muy nervioso. Mira para todos lados con miedo que alguien los haya seguido.
--venga entremos...
Eduardo no se da cuenta que sospechando que algo raro pasa Consuelo lo ha seguido. Sus ojos se le salen de la orbita a ver a su esposo con Christian.
--¿¿¡qué significa esto??¡
Le da horror pensar que tipo de relación tienen, porque su esposo es cómplice de su mayor enemigo. Christian y Eduardo se sientan en una mesa discreta. Así esperan poder hablar sin que nadie los escuche. Consuelo ha logrado sentarse en una mesa que está oculta tras un diván donde no la ven pero escucha todo lo que hablan los dos guapos. Está muy alterada y con ganas de saber que tiene su marido que hablar con ese chico al que desprecia con toda su alma.